El 10 de enero del 2016 falleció en Caracas el escultor, pintor, dibujante, diseñador industrial y docente Cornelis Zitman.
Este domingo 5 de marzo, en Secadero 3 del Centro Cultural Hacienda La Trinidad se presentará una pequeña antología de sus esculturas de pequeño formato y de los dibujos que realizaba constantemente, a veces como estudio de sus proyectos escultóricos, y otras como ejercicios infinitos de análisis de la figura humana, sobre todo femenina.
De origen holandés, Zitman llegó a Venezuela a finales de los años 40 a bordo de un barco petrolero, con la intención de establecerse en el país junto a su prometida Vera Roos.
Al emprender junto a un grupo de jóvenes empresarios la fábrica y tienda de muebles Tecoteca, Zitman comienza una de sus etapas creativas mas importantes, entonces como diseñador industrial. En este período desarrolló innumerables proyectos de hermosos y prácticos muebles de madera, apegado a la mejor tradición del diseño industrial de posguerra en el norte de Europa, siempre reinterpretando y adaptando esta experiencia a las condiciones y recursos locales. Es importante señalar que Zitman, al igual que los más importantes arquitectos venezolanos de aquella época, dedicó su mejor esfuerzo a satisfacer las necesidades de la clase media que emergía entonces en el país, en el marco de el auge petrolero y de los cambios políticos al final de los años cincuenta.
Zitman también desarrolló una importante labor docente por muchos años como profesor de dibujo y diseño en la Facultad de Arquitectura de la Universidad Central de Venezuela, así como en los primeros años del Instituto de Diseño de la Fundación Hans Neumann.
Fue al principio de los sesenta, al regreso de su estadía de varios años en la isla de Grenada y otros en Holanda, que se residencia definitivamente en Venezuela y se dedica de lleno a la creación artística, la que había empezado con buenos augurios al ganar en 1951 el premio Nacional de Escultura con la pieza Mujer sentada, apenas uno de sus primeros experimentos escultóricos.
La presente antología incluye varias piezas tempranas como Mujer tranquila, 1967, donde el artista consolida su estilo característico reminiscente de los tipos étnicos caribeños, iniciado durante su estadía en Grenada.
Destacan también los numerosos estudios de la modelo y galerista francesa Dina Vierny, fundadora del Museo Maillol de París, con quien Zitman estableció una larga relación profesional y de amistad. Se incluyen aquí Tête de Dina, 1973 y la clásica Dina, 1973, entre otras.
Hemos incluido dos piezas de formato grande menos conocidas por el público caraqueño, quienes conocen mas a Zitman por su “mujer de la hamaca” L’Inconnue, 1972, de la que incluimos una cabeza de estudio.
Luna, 1992, constituye uno de sus proyectos mas ambiciosos desde el punto de vista de la técnica escultórica y el estudio de la figura femenina. Luna desafía la gravedad de una manera mucho mas explícita y audaz que L’Inconnue en su momento. Evidencia del complejo proceso que el artista siguió para desarrollar esta magnífica pieza, son los numerosos estudios y modelos tridimensionales que sobre ella hizo previamente, de los que incluimos una selección.
Con Pescadorcito, 1992, otra de las piezas grandes presentes en la exposición, Zitman también acomete con gran virtuosismo el problema de la gravedad y el equilibrio, logrando a la vez la misma sensación de reposo y serenidad que muestra la hierática Presente, 1985.
La exposición exhibe por primera vez en Caracas algunas de las esculturas mas recientes del Maestro como El Angel, 2000, y una serie de ejercicios sobre el recurrente tema de la figura femenina como Hamaca con trapo, c. 2007 y Torso dorado, 2007, entre otras.
La muestra permanecerá abierta en el Secadero 3 del Centro Cultural Hacienda La Trinidad, desde el domingo 5 de marzo hasta el 2 de abril del 2017.
Fuente: Rafael Santana