Museo Alejandro Otero, Caracas.
Sala 5 – 11:00 am.
22/07/2017
Una Nación en pocas palabras, de Jesús Hdez-Güero, está conformada por una serie de obras de pintura, video e instalaciones que confrontan la idea del poder y el vacío, a partir de la recreación crítica de noticias y documentos desclasificados, relativos a las complejas relaciones entre los Estados-Naciones. El artista redimensiona estos materiales, enfatizando en aquellos aspectos silenciados o no esclarecidos, resaltando las omisiones y tachaduras como la forma en que el poder se manifiesta, validando el vacío como contenido.
El video: 24 horas nacionales (2009), capta la ausencia de la noticia, el tedio, la monotonía y el formalismo de la información que se experimenta al observar estos espacios noticiosos, reduciendo a mero valor estético sus supuestos valores informativos. La video-instalación: Diálogo bilateral (2014-2015), remite a otro de los eventos más trascendentes de nuestro presente: los discursos que intercambian los mandatarios de dos países que han mantenido una posición de divergencia irreconciliable durante medio siglo, son silenciados, mostrando los gestos y muecas entre frases como único diálogo. Una Nación en pocas palabras (2015-2016), obra realizada a partir de la última edición de la Constitución cubana (año 2003), establece una constelación de signos dispersos en el vacío que hacen de un documento tan específico, particular y «local», una imagen diseminada y abstracta. La serie de pinturas: Lagunas (2016-2017), se basa en una investigación y selección de documentos desclasificados de la CIA que se refieren a 5 momentos históricos importantes de las relaciones políticas y diplomáticas entre Cuba y Estados Unidos, que potencia el acto de la censura cómo valor pictórico.
El mayor interés de esta exposición (y de gran parte de su obra) es el vacío, el silencio, el ocultamiento, al ser estos conceptos, en cierto modo, contenedores, como diría el propio artista: «…del pasado en tanto un saber futuro. Un pasado que está por saberse, por lo tanto, aún no existe».
Agradecimientos:
Museo Alejandro Otero y a su directora: Nathiam Vega y al equipo de conservación, montaje y seguridad del Museo.
Museografía: Clemente Martinez
Montaje: Sr. Berrio