La aguda crisis venezolana ha dado pie a un deterioro profundo en diversas plazas y parques del país, de las que han ido desapareciendo estatuas enteras, bustos, placas, espadas de próceres, así como inscripciones en bronce y cobre
Estatua pedestre de Francisco de Miranda en Maracaibo
Institutional Assets and Monuments of Venezuela (IAM Venezuela) ha denunciado en su sitio web la proliferación del hurto de esculturas y monumentos de bronce, cobre y otros metales, principalmente en estados fronterizos de Venezuela. La organización logró identificar uno de los destinos de estas piezas patrimoniales: la reventa del material en mercados secundarios en Colombia.
IAM Venezuela es una iniciativa de la Fundación Arts Connection, que se dedica a la documentación, valoración y protección del patrimonio cultural venezolano. Es, además, parte de la iniciativa regional IAMonuments (iamonuments.com).
Entre los hurtos documentados por la organización en los últimos meses se encuentran la desaparición de la escultura de Tulio Febres Cordero y un brazo de la escultura de Gabriel García Márquez en el Paseo de la Lectura, en Mérida; el robo de una pierna a la estatua de La India, en la plazoleta del viaducto Campo Elías y avenida Las Américas, también en Mérida. En Valencia, la mutilación de un brazo al monumento al obispo venezolano Montes de Oca. En Maracaibo, la desaparición de un brazo de una estatua pedestre de Francisco de Miranda. En Coro, el hurto del busto de bronce del general Rafael Urdaneta en la plaza homónima.
Escultura de Tulio Febres Cordero y un brazo de la escultura de Gabriel García Márquez en el Paseo de la Lectura, en Mérida
Estos bustos, fragmentos de esculturas, placas, letras, espadas, escudos y otros elementos de bronce y distintos metales, una vez hurtados son llevados de contrabando hacia Colombia por distintas rutas. Allá se venden en las “chatarrerías”, según advierten los investigadores de IAM Venezuela.
Estatua de América
DEVALUACIÓN Y COSTO DE VIDA
La organización asegura que esta práctica delictiva ha tomado mayor fuerza a raíz de la continua devaluación del bolívar. En las “chatarrerías” de la frontera colombiana pagan aproximadamente 6.500 pesos por un kilo de bronce traído de Venezuela, lo que equivale a más de Bs. 21 mil (2,02 dólares al cambio del momento que se hizo la investigación); el kilo de cobre en 11 mil pesos (Bs. 36 mil /3,46 dólares); el kilo de antimonio en 6 mil pesos (Bs. 20 mil / 1,9 dólares); y el aluminio en 2.500 pesos (Bs. 8 mil / 0,76 dólares). Lo más barato es la chatarra (solo hierro) por la que pagan 360 pesos el kilo (Bs. 1.200 / 0,11 dólares).
De acuerdo con la información de IAM Venezuela, el uso de estos materiales es diverso: “Valiosas piezas de bronce que forman parte del patrimonio histórico cultural del país, estado o municipio terminan siendo fundidas en Colombia para elaborar partes y repuestos de máquinas, equipos y vehículos, así como estatuillas, trofeos, figuras ornamentales o también lápidas para tumbas del cementerio”.
Ante la situación, el presidente de la Sociedad Bolivariana de San Antonio del Táchira, Marcos Suárez, lamenta que “haya personas inescrupulosas que por las ansias de obtener dinero fácil (…) causen daño al patrimonio histórico cultural, afectación por la cual nadie responde”. Denuncia que en las plazas Miranda, José Félix Ribas y otros escenarios del municipio Bolívar hubo bustos y placas que, aunque no eran de bronce, igualmente fueron destruidos. “Exhortamos al ciudadano a no callar ante el contrabando de bronce y el vandalismo que afectan el patrimonio histórico de Venezuela, ¡denúncielo!”, afirmó.
BOLÍVAR SIN ESCUDOS
Estatua ecuestre de Bolívar en el Estado Táchira
En San Antonio del Táchira, capital del municipio Bolívar, son varios los casos denunciados. Del pedestal de la plaza Bolívar recientemente robaron cuatro escudos, letras que conformaban frases, estribos y la espada del Libertador elaborados en bronce. Además, la Sociedad Bolivariana de esta localidad también reporta el hurto de 14 placas de bronce que contenían los nombres de igual número de próceres de la historia patria de Colombia y Venezuela en la plaza La Confraternidad, construida en 1927 como tributo a ilustres personajes ejemplos de unión, lucha y hermandad entre las dos naciones. Las placas de bronce tuvieron que ser sustituidas por láminas de plástico.
En el sitio web de IAM Venezuela (https://iamvenezuela.com) pueden leerse las notas y reportajes que denuncian con detalle el saqueo patrimonial que actualmente se vive en el país y las acciones que se han venido realizando.
Fuente: María Elena Lavaud y Zinnia Martínez