Frieze London 2014. Por Lucía Pizzani

 

La impresionante feria de arte Frieze llega a su décima segunda edición este año en la cuidad de Londres. Con 162 galería de 25 países del mundo fue una muy buena muestra de lo que sucede en el arte contemporáneo y acompañada de Frieze Master, dedicada a artistas más de carácter histórico, completa la propuesta con 127 galerías adicionales.

Para recorrer y poder digerir esta avasallante cantidad de galerías esparcidas entre las 2 ferias y el adyacente jardín de esculturas fueron necesarios unos 3 días. Es una rutina a la cual la mayoría de las personas involucradas en el arte en esta cuidad hacen año tras años. Una semana en el otoño donde confluyen muchos eventos y otras ferias paralelas que dan como resultado un calendario imposible de cumplir. Entre estos eventos paralelos se puede destacar el exhaustivo libro “Mexican Contemporary Art” editado por Hossein Amirsadeghi and Catherine Petitgas, que fue lanzado en la Serpentine Gallery. También el desayuno en Gasworks donde los asistentes tuvieron un tour de la exposición actual, y pudieron contribuir a la campaña de Kickstarter que terminó exitosamente y permitirá construir 2 estudios más para artistas en residencies internacionales.

 

 

 

La feria tuvo una importante presencia de artistas y galería de Latinoamérica, sobre todo los establecidos espacios de Brasil y México. De Venezuela se pudieron apreciar un par de obras de Soto y la destacada participación de Sol Calero. Esta artista, residenciada en Berlín, transformó Laura Bartlett Gallery en un Internet Cafe, incorporando pinturas, esculturas, diseño interior, obras sonoras y colaboraciones interactivas. Entre ellas una curaduría de Juan Pablo Garza quien escogió videos de: Suwon Lee, Julián Higuerey, Hernán Alvarado, Marco Montiel-Soto, Enrique Moreno y Federico Ovalles, Armando Rosales y Raly Yance y Fabio Bonfanti, entre otros.

 

 

La galería colombiana Casa Riegner, exhibió obras sobre papel de José Antonio Suarez-Londoño junto a Bernardo Ortiz cuyas obras fueron adquiridas por la Tate a través de programa de Outset Frieze Art Fair Fund.

 

 

Otros artistas que pudimos apreciar en la feria fueron: las inmensas fotografías de Mariana Castillo Deball en la galería Mexicana Kurimanzutto, Ana María Maiolino en Luisa Strina con unas recientes esculturas para pared y una serie fotográfica más bien histórica.

 

 

 

 

En ese mismo booth estaban Cildo Mireles, Pedro Reyes y Alexandre Da Cunha. En Allison Jaques: Lygia Clark y Ana Mendieta junto a Irma Blank quien tiene ahora la individual en la galería. Esta misma galería se destacó en Frieze Masters con un Solo Project en la sección de Spotlights de la fallecida Hannah Wilke.

 

 

 

 

En la galería suiza Peter Kilchmann estuvo Teresa Margolles con la serie de fotografías “Esta finca no será demolida” del 2011. En David Zwirner se pudo apreciar una gran instalación del artista colombiano Oscar Murillo en la cual los objetos presentes en físico y en los video se mezclaban en una especie de gran collage referente a los procesos de producción. En Mendes Wood DM de Brasil Paulo Nazareth de la misma nacionalidad, mostró varias obras realizadas en sus viajes. Las obras sobre papel corresponden a su viaje a Africa y cuando estuvo en la frontera de México y Estados Unidos, realizó una instalación con los jabones que usaron aquellos que iban a cruzar la frontera para irse a Estados Unidos en su último baño antes de partir, que también estuvo expuesta en dicho stand.

 

 

 

 

 

 

 

 

Las esculturas en cerámica tuvieron mucha presencia, entre ellas se puede destacar las obras de Klara Kritalova. También llamaron mucho la atención las esculturas de Olivier Millagou en la galería francesa Sultana.

 

 

Para finalizar quisiera mencionar algunos clásicos presentes en Frieze Masters. Guiseppe Penone en Marian Goodman Gallery con los Fingerprint drawings, unos dibujos de tinta china sobre papel realizados partiendo de su huella dactilar en diversos formatos. La misma idea de imprimir sus dedos se pudo observar también en las esculturas de yeso barro exhibidas, donde al apretar la materia con su mano crea la forma, obras que parecieran ser predecesoras a las que realizó Gabriel Orozco en arcilla.

 

 

 

Otra maravilla de la muestra fue el proyecto de Hans Bellmer y Unica Zürn donde se exhibieron piezas históricas, la famosa serie de fotografías “muñecas” de Bellmer junto a dibujos y pinturas hechas por Unica y otras por el mismo Bellmer, realizadas durante sus 17 años de relación afectiva. Son obras de mediados de los años 30 y estuvo organizado por la Ubu Galería en alianza con Galerie Bernison.-

 

 

 

 

Gracias a Lucía Pizzani por la reseña y las imágenes.-