Rafael Lozano-Hemmer: Signos e Índices.
Lugar: NC-arte
Dirección: Cra 5 No. 26b – 76. Bogotá, Colombia.
Fechas: Del 25 de octubre al 20 de diciembre 2014.
Entrada libre
El ganador de 2 premios BAFTA al Arte Interactivo y del Prix Ars Electronica en Austria trae a NC-arte cuatro instalaciones interactivas a partir del 25 de octubre.
Instalaciones que observan, escuchan, sienten y reaccionan ante el público son las que el mexicano Rafael Lozano-Hemmer exhibirá en el espacio de arte contemporáneo NC-arte en Bogotá, desde el 25 de octubre, en una muestra llamada Rafael Lozano-Hemmer: Signos e Índices. Las pulsaciones, la respiración y las imágenes de los asistentes serán parte de la obra interactiva de Lozano-Hemmer que ya ha sido parte de las galerías y museos más prestigiosos del mundo.
Hasta el 20 de diciembre se podrá ver el trabajo de este mexicano que llega a NC-arte luego de sus exitosas exhibiciones en el Espacio Fundación Telefónica de Madrid (España) y el Borusian Contemporary en Estambul (Turquía).
De pulsaciones, suspiros, corazonadas y el arte tecnológico
Almacén de corazonadas, El último suspiro, La media noche del año e Índice de corazonadas serán las cuatro obras de Lozano-Hemmer que modificarán por completo los dos pisos y 500 metros cuadrados de NC-arte en Bogotá.
En cada una de estas cuatro instalaciones el artista visual mexicano se apoya en la tecnología para generar interacción con el público en piezas que son finalizadas cuando alguien las contempla y deja algo de su información vital en ellas: su imagen, su huella digital, las pulsaciones de su corazón o su respiración.
En Almacén de corazonadas Lozano-Hemmer reúne más de un centenar de bombillos que se activan cuando el visitante pone uno de sus dedos sobre un sensor que registra los latidos de su corazón. El efecto visual creado culmina en un paisaje activo de luces que se prenden y apagan al ritmo cardíaco de los asistentes; la acción del artista da cuenta de las pequeñas sutilezas que diferencian una cadencia cardíaca de otra.
El público sigue siendo el protagonista en La media noche del año, obra en la cual cada uno de los visitantes se pone frente a una pantalla que refleja su imagen sin ningún tipo de filtro. Después de unos segundos un algoritmo genera que salga humo y luz de los ojos de la persona, la interacción termina cuando la pantalla es invadida por la humareda. Lozano-Hemmer toma así prestada la mirada de quiénes disfrutan de su obra.
Un aparato sencillo que se basa en un fuelle que se infla y se desinfla, y expulsa e inspira automáticamente el aire vital de una persona que previamente lo sopló dentro de una bolsa de papel; su respiración circula entre esos elementos y un tubo de plástico acanalado que recuerda a un hospital junto al sonido de su corazón. Esta instalación ya ha tenido El último aliento de Omara Portuondo, Leonard Cohen y otros talentosos artistas.
Las huellas digitales de los visitantes quedan registradas en Índice de corazonadas. Lozano-Hemmer se basa en la información biométrica por excelencia, luego la proyecta en una pantalla mientras esta se exhibe al ritmo de su corazón. Las líneas de identificación van cambiando a medida que el público comienza a llegar y, al final, el artista posee un paisaje humano armado a partir de rasgos característicos únicos.
Rafael Lozano-Hemmer: Nacido en México en 1967 Rafael Lozano-Hemmer es un artista visual que afirma que sus creaciones se ubican entre el performance y la arquitectura, pues su interés no es la obra en sí sino la interacción que estas generan con sus visitantes.
Fue el primer artista mexicano en representar oficialmente a su país en la Bienal de Venecia con una exhibición en solitario (2007). Su trabajo ha sido parte de otros eventos masivos como la Cumbre Mundial de las Naciones Unidas celebrada en Lyon (Francia, 2003), la apertura del Museo YCAM en Yamaguchi (Japón, 2003), el 50 Aniversario del Museo Guggenheim de Nueva York (USA, 2009), los Juegos Olímpicos de Invierno en Vancouver (Canada, 2010). En cuanto a muestras en solitario, Lozano-Hemmer, ha expuesto en el Museo de Arte Contemporáneo de Sydney (Australia), Museo de Arte Moderno de San Francisco (USA) y Fundación Telefónica en Buenos Aires.